Cuando les entran las ganas de picar, a los niños les encanta coger los alimentos ellos solos metiendo los dedos por las solapas, y a los papás les encanta el hecho de que esas mismas solapas eviten que toda la comida termine tirada por toda la casa o por el coche.
tiene dos asas diseñadas para que las puedan agarrar incluso las manos más diminutas, y la parte inferior antideslizante para que no se mueva de la mesa, la trona o a la hora de comer en el cole.